ENVIADOS, HASTA LO ÚLTIMO DE LA TIERRA

El cierre de una conferencia que marcó corazones, despertó llamados y movilizó a los obreros a salir a la gran comisión.

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El tercer día de «Enviados» no solo significó el final de esta primera edición de la conferencia misionera, sino el inicio de un despertar hacia las misiones de manera integral. De comienzo a fin, cada palabra desafió y rompió con estructuras pensantes, extendiendo nuestra visión y compasión por los no alcanzados.

Durante la mañana, tuvimos la oportunidad de orar por más de tres mil pueblos que actualmente no cuentan con la traducción de La Biblia en su idioma. Cada uno de ellos se encontraba anotado en un extenso lienzo que descendió desde el púlpito hacia uno de los pasillos del santuario. Todos extendieron sus manos hacia él.

JUAN MASALYKA: UNA MISIÓN PARA TODOS

Luego, la palabra de Dios fue compartida por Juan Masalyka, pastor y fundador del Centro Cristiano, una iglesia madre en el envío de misioneros. Masalyka también es director del Instituto Bíblico Mediterráneo, miembro del Departamento Nacional de Misiones y director de la Unión de las Asambleas de Dios. Su mensaje en «Enviados» fue dirigido al trabajo de la iglesia en general y aseguró que «cada iglesia local debe involucrarse en las misiones», lo que significa que cada miembro también debe estar activo en la obra misionera. Con respecto a esto, también afirmó que en el momento en que la iglesia se involucra en misiones, se expande.

Por otro lado, el pastor declaró que «la extensión del Reino de Dios es prioridad y obligación», y está expansión se produce cuando la iglesia está dispuesta a dispersarse y no quedarse en el mismo lugar. Agregó, además, que esta tarea no es opcional, sino que la predicación de la palabra es necesaria y un eje central para los hijos de Dios; un motor de movilización como la oración. Para finalizar, advirtió que si salimos a las misiones tendremos luchas y problemas, pero debemos recordar algo: Dios va a estar con nosotros.

Así concluyó la mañana de este domingo. Sin embargo, mientras en el auditorio principal transcurría toda la actividad ya mencionada, en el edificio paralelo se llevó a cabo «Enviados Kids». Fue una actividad especialmente para niños, una adaptación de la escuela dominical a la conferencia misionera. En la misma, los más pequeños tuvieron la posibilidad de conocer cómo viven niños de otras partes del mundo y disfrutar de sus comidas típicas. Por la tarde también se llevó a cabo.

DONALD EXLEY: EL ESPÍRITU SANTO ENVÍA

La última prédica de estos tres días marcó las vidas de los que escucharon el mensaje. El pastor Donald Exley, después de agradecer la invitación a la conferencia, comenzó a hablar sobre el imprescindible poder del Espíritu Santo que, aseguró, es una promesa para el misionero. «Es un poder que viene con un propósito espiritual», dijo y agregó que «es aquel que nos da la valentía para perdonar» y «produce la capacidad espiritual para ver los milagros, para que la gente crea».

Por otro lado, mencionó que «toda persona llena del Espíritu Santo debe estar hablando de Jesucristo en todo lugar». Con esto, se refirió al efecto que produjo el Pentecostés en aquellos que lo vivieron, ya que el Espíritu Santo los eligió para luego enviarlos a donde él deseaba. «Dios nos llama a salir a todos lados para salir de nuestra zona de confort y llegar con la palabra a todo el mundo», aseguró. Por último, el pastor afirmó que el bautismo es para todas las personas y el poder del Espíritu Santo es para cada generación. Dicho esto, oró para que ese poder se manifestara, llene las vidas y envíe a cada uno a cumplir con su propósito hasta los confines de la tierra.

Así finalizó la conferencia que, en tres días, mostró el amor del Padre hacia las naciones y su deseo para que nosotros, sus hijos, abramos nuestros ojos y corazón hacia aquellos por alcanzar con Su amor.